jueves, 25 de marzo de 2010

El Arte Bárroco

Al Barroco se le conoce como el período que transcurre desde el siglo XVII al XVIII. Este se difundió por todas las naciones de Europa.
El arte barroco cumplió un papel muy importante en los conflictos religiosos de este periodo. Se caracteriza por su estilo sobrio y sin decoración.
La iglesia católica usó para sus fines litúrgicos el esplendor y la complejidad barrocos.
La monarquía utilizó la grandeza de este arte para poder hacer propagandas que los favoreciesen, ya sea en el arte o en la sociedad.


Características en Italia

Las nuevas concepciones artísticas que surgieron fueron a causa de la contrarreforma debido al conflicto ético que se origino en aquel momento en la Iglesia católica.
Los tres grandes nombres del período mayor del florecimiento barroco en la arquitectura, Piero de Cortona, Bernini y Borrominni entre otros.

Características del barroco en Francia
En Francia surge una generación de grandes pintores, dotados de personalidad, inspirado por el clasicismo pagano italiano.
Dentro de los edificios característicos del arte francés fueron los palacios, el palacio de Versalles, el cual Luis XIV hizo embellecer y ampliar.


Arquitectura

La arquitectura barroca se caracteriza por sus superficies onduladas, las plantas elípticas. Además, se puede encontrar una exageración de la monumentalidad.
Esta, influyó activamente en América del Sur, y dentro de sus principales figuras representativas están los arquitectos José de Churriguera (retablo de San Esteban de Salamanca), José de Ribera y a arquitectos del s. XVIII como Hipólito Rovira. Asimismo, están Casas Novoa y Leonardo de Figueroa. Este último destaca por sus manifestaciones como la basílica de Guadalupe, la fachada del Sagrario de la catedral, la capilla del Pocito y las iglesias poblanas, en México. En el Perú, la arquitectura se entremezcla el empleo de la columna salomónica con el de la hojarasca decorativa indígena.




Escultura
En esta época la intensión de la escultura fue de sentido decorativo en la composición general, con cierto gusto por la teatralidad; es decir que no representaba una escena amplia como en el Renacimiento sino que ahora solo se concentraban en una única acción.
Se encargan de reflejar los fondos de los retratos y los altares de las iglesias, destacando el movimiento y el dinamismo en todas las acciones.
Sus imágenes revelan pasiones violentas, lentas y enaltecidas.
Los artistas Greco y de Caravaggio resaltaron nuevos contenidos religiosos y moralista, contribuyendo a una diferente renovación de la expresión figurativa en ese momento.



Pintura

Incremento el creciente interés por la decoración en todas las obras. Tienen sus inicios en las alegorías de los cuadros devotos (la calavera, el éxtasis celestial, la mirada en rapto doloroso o apasionado). Sus obras connotan pasión, con un intenso claroscuro en las tonalidades.